Fotografía: Crónica Jalisco

En entrevista para El Informador (11/Septiembre/2020), en el programa los ‘Sótanos del Joder’, Pablo Lemus mencionó que el Gobernador lo invitó directa y personalmente a encabezar la lista plurinominal de diputados locales por MC y coordinar la fracción parlamentaria (¿y la división de poderes?). Expresó: “eso claro que me interesa, me interesa darme a conocer en todos los municipios de Jalisco, hacer campaña en todo el estado (…) porque yo sí quiero ser gobernador (…) no me late el papel de ser diputado, pero sí me late el papel de moverme por todo Jalisco” (https://www.facebook.com/115103408384/videos/386604825659338). Pero no necesita ser diputado local para ‘moverse’ en todo el estado y construir un proyecto político estatal. López Obrador, sin ser servidor público, recorrió los dos mil 446 municipios del país, en al menos dos ocasiones, antes de ganar la presidencia de la República. 

De acuerdo con la encuesta ‘100 alcaldes de México’, de Mitofsky, publicada el 12 de julio de 2020, Lemus Navarro ocupa el lugar número 11° como alcalde mejor evaluado del país, con una aprobación del 62.7 por ciento [el mejor evaluado, de Tampico, Tamaulipas, registra una aprobación de 70.2 por ciento]. Tal vez por su gestión, por la insistencia de marcar independencia política respecto del primer núcleo de MC, y como consecuencia, de hacer valer su derecho a disentir, el presidente municipal de Zapopan se sabe con personalidad propia y activos políticos suficientes para presentarse como candidato competitivo a un cargo de elección popular. Pero, ¿cuál? 
 
En mayo de 2019, Lemus terminó su relación institucional con Indatcom, por lo que él calificó como ‘errores sistemáticos y dolosos’ en que incurría esta empresa al administrar las redes sociales de Zapopan. En julio de 2019, rechazó públicamente la propuesta inicial de la Policía Metropolitana, y se opuso también a destinarle “recursos humanos, financieros y administrativos”. Durante el tercer trimestre de 2019, se negó sistemáticamente a otorgar los permisos de habitabilidad para la venta de las Villas Panamericanas, y se comprometió a que mientras él sea presidente, no se autorizarán esos permisos.  
 
Son, precisamente los legisladores, los servidores públicos peor evaluados del país en términos de confianza (INEGI, ENCIG: 2020). De forma que, ir al Congreso, y asumir una disciplina espartana (como ahora ocurre), no parece ser una acertada fórmula para cultivar el capital político derivado de su gestión como presidente. 
 
Para el Poder Ejecutivo, las decisiones en el Legislativo son de mayor relevancia que las que ocurrieron en un municipio metropolitano. Ahí se crean, reforman y abrogan leyes para todos los jaliscienses. Se aprueba presupuesto, cuentas públicas y se designan cargos para el poder Judicial, para los órganos constitucionalmente autónomos, entre otras cosas. Si como coordinador de diputados, Lemus ejerciera la misma autonomía política que en Zapopan, con su estilo de diferir, podría terminar en un abierto enfrentamiento y aislado del resto de los legisladores de MC. Por el contrario, si fuese un legislador disciplinado (gris), su futuro dependería del primer círculo del gobernador, al que no pertenece, y en el que no conserva aliados. Tómalo o déjalo, el “dilema de Hobson”. 
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https://www.milenio.com/opinion/gabriel-torres-espinoza/con-pies-de-plomo/pablo-lemus-a-donde