Ocurre una innegable problemática respecto de las ‘pensiones doradas’ de funcionarios públicos. Pensiones ofensivas, que incluso superan la remuneración del presidente de la República. De forma que fue presentada una iniciativa de decreto que reforma diversos artículos de la Ley del Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco, misma que fue presentada el 19 de julio de 2021 por el gobernador constitucional del estado de Jalisco.
Al respecto es oportuno considerar que, en el año 2019, por cada pensionado solo había ya 3.3 afiliados, cuando en el año 2013, por cada pensionado había 6 afiliados. A partir del 2019, el pago de nómina de pensionados ha superado los ingresos por aportaciones de afiliados, dejando un déficit de 58 millones de pesos. Esta tendencia se irá acentuando y se proyecta que para el año 2021, el déficit alcance los mil 489 millones de pesos. En el año 2022 se van a duplicar las personas con derecho adquirido a pensión vs. año 2020 (Año 2020: 6,292 personas con derecho adquirido a pensión, año: 2022: 13,240 personas con derecho adquirido). Un crecimiento del 110% en apenas dos años.
El periodo de suficiencia y agotamiento del Fondo de Reservas entrará en crisis en el año 2029, si no se aplican cambios drásticos al Fondo de Pensiones. El saldo al cierre del 2020, fue de 37 mil 173 millones de pesos. En el 2029, las Reservas del Fondo se agotarán y se requerirán aportaciones extraordinarias para cubrir los requerimientos en 2029 por 4 mil 905.68 millones, con aumentos anuales del 30% en promedio.
De conformidad a la información disponible en la página oficial del Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco, se puede advertir que en la actualidad, existe una gran brecha de desigualdad entre los pensionados, toda vez que nos encontramos con que la máxima pensión otorgada por el Instituto de Pensiones equivale a $206,736.41 (doscientos seis mil setecientos treinta y seis pesos 41/100) mensuales, mientras que la menor pensión alcanza apenas los $772.20 (setecientos setenta y dos pesos 20/100) mensuales.
Actualmente existen 959 pensionados por jubilación, cuyo monto mensual de la presente anualidad superó los $50,000.00 (cincuenta mil pesos).
Coincidentemente, la mayoría pertenecen a la categoría legal relativa a servidores públicos de confianza.
Es por ello que las exorbitantes pensiones otorgadas a los altos ex funcionarios generan dificultades financieras al Instituto de Pensiones, cuyos efectos son la insostenibilidad del esquema de seguridad social para garantizar su derecho tanto a los actuales pensionados como a los futuros. Además, las pensiones se amplían porcentualmente año con año. En el 2019, el incremento para pensionados que reciben mensualmente una cantidad de 0 a 50 mil pesos fue de 4.83%; a los de 51 mil 001 a 100 mil pesos el aumento fue de 2.44%; mientras que de 100,001 en adelante el aumento en la pensión fue de 1.21%.
Debería ser aprovechado el consenso social con relación a las indignantes pensiones en el Ipejal [de hasta 206 mil pesos mensuales], para impulsar una reforma con altitud de miras que haga una ‘promediación’ del sueldo devengado por el burócrata durante toda su vida laboral. Pero, sobre todo, establecer un auténtico control por parte del Congreso del Estado de Jalisco, sobre las inversiones multimillonarias fallidas, que han sido auténticos fraudes en contubernio con empresarios corruptores, que siguen en la felicidad de la impunidad absoluta.