En el proceso legal que siguen Jorge Vergara y su –aún– esposa Angélica Fuentes, destacan detalles relevantes y de interés público, referentes a nuestro precario y peculiar sistema de justicia, a la luz de los hechos que asoman en el proceso legal que ambos enfrentan. Veamos. El pasado 6 de octubre, el titular del Juzgado Segundo de lo Penal de Zapotlán El Grande, José Efraín López Ramírez, giró una orden de aprehensión contra Angélica Fuentes y dos de sus colaboradores, por la presunta administración fraudulenta en Grupo Omnilife. Ese mismo día –ojo–, apenas dos horas más tarde, el Consejo de la Judicatura del Estado de Jalisco sesionó de manera extraordinaria y ex profeso para separar del cargo –por unanimidad– al Juez López Ramírez, al argumentar una “posible irregularidad muy grave”. Lo anterior, porque este indebido acto de autoridad sucedió en un municipio [Ciudad Guzmán] donde ya operan los juicios orales [desde el 1/Oct/2014], y el juez en cuestión debió excusarse y turnar el caso al nuevo sistema de acusatorio adversarial.
Destaca la inusual celeridad de la autoridad para actuar en el proceso, intervención que se motiva por una violación al debido proceso. Lo inusual en todo esto es que, lamentablemente, queda en evidencia que la plena observancia del debido proceso sólo se cuida cuando personas con poder o dinero recurren a la justicia. Es a todas luces evidente que si este principio de derecho tuviera vigencia para todos, habría muy pocos en los centros penitenciarios del país. Al respecto, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, publicó en 2013 un sinfín de violaciones elementales al debido proceso que acusan los reos de las cárceles mexicanas: el 57 por ciento denunció amenazas para declarar en cierto sentido; el 60 por ciento fue golpeado al momento de su detención; el 72 por ciento no fue informado que tenía derecho a no declarar; y un largo etcétera.
Conviene preguntarse, ¿cuántos jueces han sido separados del cargo por liberar corruptos y delincuentes mediante amparos y violaciones al “debido proceso”? De lo anterior, resulta importante cuestionarnos, ¿los tribunales son de justicia o de derecho? El jurista mexicano, Ignacio Burgoa, señalaba …Clic aquí para continuar leyendo.