l 7 de marzo de 2009, MURAL documentó la compra irregular de 39 motoconformadoras de origen chino para la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder). Como casi la mayoría de los casos detectados de corrupción en Jalisco, este asunto nace en la prensa, que investigó el caso y lo denunció ante la opinión pública. Todo comenzó con la autorización de un crédito estatal el 29 de noviembre de 2008, por 548 millones 65 mil 380 pesos. Días después, el 3 de diciembre de 2008 se autorizó la “renovación de la maquinaria” de la Secretaría de Desarrollo Rural y se determinó comprar 12 conformadoras y 27 motoconformadoras. Dos meses más tarde, el 9 de febrero de 2009, se realizó la licitación L2/2009, para adquirir esta maquinaria. Las empresas FTO México S. de RL de CV y Distribuidora Megamak S.A. de C.V. son descalificadas porque no reunían los requisitos. La licitación la gana Megussa industrial S.A. de C.V.
Naturalmente que ante el jugoso negocio, se judicializó la compra. De forma que el 11 de febrero de 2011 se resolvió por el Tribunal de lo Administrativo TAE (sí, también aquí intervino) que deberían comprar las máquinas a la empresa FTO México y 16 más a Megamark. Nuevamente, uno de los magistrados suertudos del TAE, Armando García Estrada, resolvió el polémico caso. ¿Casualidad? Todo fue ‘resuelto’ en contra del patrimonio público por uno de los dos magistrados “suertudos” del TAE. El 6 de abril de 2011, Magamak se desiste de vender las 16 máquinas que le correspondían. Un día después, se firma un segundo contrato para que FTO entregue las 16 máquinas que le correspondía vender a Megamak. Las totalidad de las máquinas fueron terminadas de entregar en octubre de 2011.
Apenas meses después se pudo advertir el gran fraude, ya que las máquinas caras y malas comenzaron a fallar. De forma que el 25 de enero de 2012 el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses emite un dictamen donde verifica y comprueba el mal funcionamiento de la maquinaria (tal como lo publicó el equipo de 44Lab). El 23 de octubre 2013 se emite un segundo dictamen, donde se confirma que las motoconformadoras compradas acusan problemas hidráulicos. Incluso, se formula un tercer dictamen, el 31 de enero de 2014, que reafirma que se entregó ¡maquinaría distinta a la pactada en los contratos de la licitación!. En síntesis, ¡no cumplieron con las especificaciones técnicas descritas en la compra!. En septiembre de 2014, el contralor Bañuelos Guardado presenta denuncia ante la Fiscalía. Una de las 12 denuncias que se hicieron, más las seis presentadas por Tere Brito, mismas que se mantienen congeladas, por falta de voluntad política. De tres presuntos responsables de bajo perfil (porque los verdaderos beneficiarios del fraude nunca fueron investigados por el gobierno), dos ya agotaron las instancias y quedaron libres de castigo, y a uno le falta poco para librarse. Lo lamentable es que la maquinaria adquirida con deuda sería utilizada para bordos y caminos. El afectado, el empobrecido campo de Jalisco. Hoy la maquinaria se encuentra escondida, inservible, como fiel testimonio del sexenio de la corrupción, de Emilio González y Álvaro García Chávez. Hoy totalmente impune, debido a la protección política que pactó este gobierno de alternancia para todos los señalados por corrupción en el gobierno anterior (los casos de Alfonso Petersen y Luis Carlos Nájera son elocuentes, hasta los premiaron). Afortunadamente un diputado del Congreso de Jalisco desempolvó la denuncia presentada por el Contralor. El grupo de periodistas de Señal Informativa siguió la pista a la empresa FTO México, que fue la que ‘ganó’ la licitación con la ayuda de un magistrado del Tribunal de lo Administrativo, señalado por múltiples casos plagados de irregularidades. La empresa FTO cambió ya varias veces de razón social. Hoy se documenta que las máquinas defectuosas están en el predio del 7 mil 450, del cruce del Periférico Manuel Gómez Morín con Volcán del Colli. Justo ahí, esperando que el ‘Sistema Anticorrupción’ abra los ojos, las orejas y se determine a actuar… Ya es hora de que dejen la zona de confort. Toda esa burocracia instalada, con tanto respaldo, debe demostrar ahora que pueden reportar alguna utilidad.