Por Mario Ávila Aunque faltan muchas partidas por disputarse, de cara a la elección de gobernador en el 2024, el ajedrez político de Jalisco va tomando forma y al menos en el partido en el gobierno no parece haber sombra que obstruya la llegada del alcalde, Pablo Lemus, a la candidatura al Gobierno del Estado.
por parte de la primera minoría, Morena tendría que recurrir a un candidato externo si quiere aspirar al triunfo; en la alianza PRI, PAN, PRD lo interesante sería ver al personaje que elijan como candidato (a) y será interesante ver si los partidos locales (Hagamos y Futuro) compiten solos o en coalición.
De ello habló con lujo de detalle el politólogo Gabriel Torres Espinoza, quien detalló que Morena ha quedado demostrado que en Jalisco es mucho partido, pero sin candidato, sin estructura, “solo tiene mucha gente que apoya al partido, simplemente porque apoya al gobierno de Andrés Manuel López Obrador”.
Eso explica porqué la marca aparece arriba en las preferencias electorales que se han realizado de cara a la elección de gobernador en el 2024, pero ese mismo instituto político se desploma cuando se ponen en competencia los nombres de algunos destacados morenistas como candidatos.
“Por ello, no descarto que el partido del presidente, como lo ha hecho en otras entidades federativas, pudiera ver con simpatía un liderazgo emergente que no milite en Morena, pero que eventualmente pudiera ser quien abanderara la lucha electoral por la disputa del voto en una entidad, en donde por alguna razón el partido del presidente no ha logrado consolidar una gran estructura”, planteó el director del Sistema Director del Sistema Universitario de Radio, Televisión y Cinematografía de la UdeG.
Torres Espinoza, académico, profesor investigador y periodista, habló de las posibilidades que tiene la alianza “Va por México” de operar en Jalisco una candidatura al Gobierno del Estado de coalición, aprovechando la buena disposición de las tres mujeres que presiden a los tres institutos políticos involucrados; sin embargo también se refirió a la posición que podrían jugar los dos partidos con registro estatal, Hagamos y Futuro, que en el 2024 ya podrían participar en alianza con otro instituto político y en un momento dado podrían ser factor determinante en el resultado de la contienda electoral. Gabriel Torres Espinoza, habló así para los lectores del semanario Conciencia Pública.
HAY SUMAS QUE RESTAN
P.- ¿Están definidos los personajes o podrían surgir nuevos actores de cara a la elección de gobernador del 2024?
R.- En el campo de la oposición al partido que gobierna en Jalisco, sí faltan personajes en el escenario. Está por verse si los partidos políticos con capacidad de coaligarse, pueden o no construir, quieren o no y tienen o no un candidato en común, para presentar una coalición electoral que haga frente al partido en el gobierno. Se habla de que varios partidos, especialmente el PRI, el PAN y el PRD intentan una coalición, y aunque las tres presidentas son mujeres, la oportunidad de que postulen a una mujer estará ahí, pero no veo en este momento quien tuviera el nivel de posicionamiento para ser candidata.
Sin embargo, más allá de que se trate de mujeres las tres que dirigen un partido que buscan la coalición, yo creo que lo que motiva justamente esta alianza es que partidos de ideologías distintas presenten una candidatura en común, es la posibilidad de formar gobierno y para que esto ocurra así se tiene que analizar con mucho detalle la rentabilidad electoral, es decir que la propuesta que acuerden en común, marque en estudios elaborados para tal efecto, que resulte una opción viable a ganar las elecciones, yo creo que presentar una persona que no tenga la socialización suficiente, ahora que además las campañas electorales son cada vez más cortas, duran menos tiempo, habría una posibilidad de éxito muy baja.
P.- ¿Aplica la sumatoria de 27% que los tres lograron en el 2018 o es una suma que resta?
R.- No bueno, pues es que hay efectivamente sumas que restan, cuando quien encabeza no concilia los intereses de los partidos y cuando además el conjunto de la estructura de las candidaturas, o el frente que se presenta para formar la coalición, no está bien distribuido. Yo creo que para lograr una coalición exitosa tienen que conciliarse las expectativas de los partidos que tentativamente formarían parte de esta coalición, pues esos intereses hay que conciliarlos en candidaturas y en personas que digamos puedan tener la confianza de las dirigencias de los partidos, pero también de la estructura y de las bases militantes de los propios partidos. Reitero entonces que es muy importante quién pudiera encabezarla y luego vienen los acuerdos respecto de la competencia en otros ámbitos de la participación electoral, como alcaldías y diputaciones, entonces habrá que ver qué tipo de coalición podría surgir.
Porque sumar aritméticamente los porcentajes que en el pasado han tenido, yo creo que sería muy poco exacto hacia el futuro, porque la estadística del comportamiento electoral pasado, no necesariamente significa un estudio de prospectiva, es decir el futuro siempre es incierto y si bien la estadística nos ayuda a entender lo que ha sido posible en el pasado inmediato con condiciones y coyunturas muy específicas, siempre la políticas tiene un mucho de circunstancia y la circunstancia cambia de un proceso a otro, cambia quiénes encabezan las candidaturas y con ello también cambia la percepción de los votantes con respecto a los partidos.
P.- ¿A los dos partidos locales qué les augura, ahora que ya pueden ir en alianza y no necesariamente deberán jugar solos?
R.- Habrá que ver cuál es la estrategia que estos dos nuevos organismos políticos estatales van a priorizar, si mantener el registro, si ser factor determinante para que alguna coalición gane la elección, es decir sí depende mucho de lo que cada instituto político defina cuál es su prioridad de cara a las siguientes elecciones.
Pero dices algo muy cierto y muy importante, hoy los partidos, estos dos institutos que en el pasado proceso tenían que demostrar por sí mismos sin ninguna coalición, que eran capaces de captar el mínimo de votos que la ley establece para mantener el registro, hoy si una vez que ya lo demostraron que son partidos con un registro legal y legítimamente constituido, hoy podrían formar parte de una coalición y lo que hemos visto en las elecciones locales de este año y las del año pasado.
Lo que está en boga son los acuerdos comunes para presentar candidaturas conjuntas, porque la fortaleza del partido del presidente ha sido tal, ha sido de un peso tan aplastante, además del aparato propagandístico del partido del presidente, que es verdaderamente difícil ganarle hoy al partido del presidente, además con la fuerza moral que tiene la figura del presidente López Obrador y los niveles de aceptación y aprobación, que a pesar de todo sostiene su gobierno, que a mí me parece un suicidio de la oposición ir por caminos distintos y dividir el voto de oposición entre varios partidos, yo creo que, digo no es una consideración estrictamente personal ni una corazonada, se basa en el estadístico de resultados de los últimos tres años, si los partidos no van en coalición es muy difícil ganarle al partido del presidente, no imposible, pero sí muy difícil.
Creo que la moraleja de los procesos electorales locales es que si los partidos de oposición no encuentran coincidencias, si no se ponen de acuerdo para poder competir con candidaturas comunes de cara a un partido sumamente fuerte del Ejecutivo federal, lo más probable es que tengan un fracaso como ya se ha demostrado en otras elecciones.
MORENA ES MUCHO PARTIDO, PERO SIN CANDIDATO, SIN ESTRUCTURA
P.- ¿Qué le augura a Morena, que en Jalisco tiene aceptación, pero cuando se ponen nombres de candidatos, se desploma en las preferencias?
R.- Yo no descarto un liderazgo externo, porque como bien lo apuntas Morena en cada estado tiene condiciones sui géneris muy particulares, yo creo que una de las características de Morena en Jalisco es que es mucho partido sin candidato, sin estructura, hay mucha gente que apoya a Morena porque apoya al gobierno de López Obrador y en consecuencia traducen esa simpatía al partido del presidente, pero yo veo un trabajo político muy precario de ese partido en Jalisco, a pesar de que ha ganado espacios importantes, siguen siendo marginales con respecto a lo que en la mayoría de las elecciones locales han conseguido, por lo que no descarto que el partido del presidente, como lo ha hecho en otras entidades federativas, pudiera ver con simpatía un liderazgo emergente que no milite en Morena pero que eventualmente pudiera ser quien abanderara la lucha electoral por la disputa del voto en una entidad, en donde por alguna razón el partido del presidente no ha logrado consolidar una gran estructura.
P.- Se ha mencionado incluso la posibilidad de que el rector de la UdeG sea ese liderazgo externo, ¿usted lo ve viable?
R.- Lo han mencionado porque es una figura importante en Jalisco, pero yo creo que el rector, como lo ha dicho en muchas ocasiones y como está consignado en los medios, él quiere seguir siendo rector. Yo veo a Ricardo Villanueva muy entusiasmado a su corta edad con la enorme responsabilidad y la distinción que la comunidad universitaria le ha dado para ser el rector de la máxima casa de estudios, yo no lo veo encampañado, lo veo más bien atendiendo los temas y la defensa de la autonomía de la universidad en una condición que además le tocó esa rectoría bajo circunstancias de asedio, de incomprensión gubernamental, en donde por primera vez en la historia a la Universidad de Guadalajara se le ha recortado el presupuesto dado por el Congreso del Estado y donde también por primera vez en la historia hemos encontrado a un gobernador que descalifica abiertamente el trabajo de la universidad y ningunea a sus autoridades, bajo una serie de argumentos que son difíciles de compartir por la comunidad universitaria.
P.- ¿En el partido en el gobierno, no ve usted sorpresas?
R.- Yo veo muy difícil que de parte del partido en el gobierno puedan cambiar o surgir nuevas cartas. Y digo muy difícil porque uno de los grandes temas hoy es el de la rentabilidad electoral y en ese asunto es algo que no se construye de un día para otro y a mí me parece que el alcalde de Guadalajara tiene un tramo y un recorrido hecho, un camino andado muy importante y no veo a otro actor político en Jalisco, que pueda en lo que falta de tiempo, llegar a los niveles de aceptación y de reconocimiento que hoy tiene ya el alcalde de Guadalajara.
Y más allá de la persona, esto ha venido ocurriendo en los últimos años, ya que los últimos gobernadores, incluyendo al actual han salido precisamente de haber gobernado la capital de Jalisco, que por su peso tamaño y visibilidad, le dan los reflectores y la socialización necesaria para que tengan activos de cara a la competencia político-electoral de la gubernatura.
De tal forma que de parte del partido en el gobierno el camino está muy andado, las cartas muy vistas y el gallo muy jugado. Hay otros que, por supuesto han levantado la mano, pero si analizamos fríamente los números que las encuestas publicadas han hecho del dominio de la opinión pública, vemos que el alcalde de Guadalajara lleva mucha ventaja.
P.- Finalmente maestro, ¿quién sería el rival a vencer para Movimiento Ciudadano en Jalisco?
R.- Yo creo que el principal rival a vencer para el partido en el gobierno, es el partido del presidente, Morena, que en sí mismo, la marca ya despunta en las encuestas, es un partido que por alguna razón tiene una rentabilidad electoral muy importante y lo ha venido demostrando en todas las elecciones locales, el ganador o en el peor de los casos, la primera minoría, ha sido el partido del presidente.
Y yo creo que en Jalisco no será la excepción, es decir estará disputando el primero o el segundo lugar. Lo que no está claro es quién pueda ser su candidato, yo creo que ahí todavía falta decantar mucho, habrá que ver si sale de las filas de Morena o invitan a un externo como candidato. Yo creo que así en el terreno de la oposición hay mucho por ver.