Foto: Sydney Criminal Lawyers

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Por fin los legisladores federales han elaborado una ley que protege los derechos de los usuarios de las aerolíneas, en México. La ley se aprobó en la Cámara de Diputados por amplia mayoría (422 diputados), debido a la urgente necesidad de poner un alto a tantos abusos, excesos, malos tratos y -con algunas honrosas excepciones- pésimos servicios. Ahora que la ley pasó para su análisis al Senado, las aerolíneas amagan con subir los precios a los usuarios, si se les obliga a respetar sus derechos como consumidores. «Las modificaciones a la Ley de Aviación Civil en materia de derechos de pasajeros provocarán el aumento de tarifas aéreas y falta de viabilidad financiera a las aerolíneas, advirtió la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero)» (Mural, 26 de abril del 2017). La amenaza está clara, y para socializarla han recurrido a los mejores despachos de cabildeo para presionar a los senadores a dar marcha atrás a los avances en los derechos de los usuarios que habían conseguido los diputados federales.

Para advertir de qué tamaño es el problema, viene bien recordar que sólo durante 2016, de un total de 286 mil 186 operaciones de aerolíneas nacionales, un 39% fueron realizadas con demora, en perjuicio de los pasajeros. De este 39% (4 pasajeros afectados de cada 10) el porcentaje de operaciones con demora imputable directamente a la aerolínea -de lo que NO se hacen responsables ahora- registró un 22%. Las tres aerolíneas nacionales que más porcentaje de operaciones con demora imputable acreditan son: Magnicharters (32%); Volaris (31%); Interjet (23%). Mientras que, en 2016, de 45 mil 831 operaciones de aerolíneas internacionales, el 72% de éstas fue realizado a tiempo, mientras que el 28% fueron operaciones con demora. Las tres aerolíneas internacionales que más porcentaje de operaciones con demora imputable registran, son Cubana de Aviación (41%); Jet Blue Air (20%); Air France (19%).

Incluso, del total de las operaciones -332 mil 017 unidades- (nacionales e internacionales en 2016 en el AICM), los retrasos imputables a las aerolíneas corresponden al 18.7%, que son ¡60 mil 262 retrasos causados por causa de las aerolíneas! Cabe mencionar que del total de operaciones con demora imputable a las aerolíneas (60 mil 262 operaciones), las más recurrentes son: el 61.9% corresponde a operaciones de la aerolínea directamente; 14.4% corresponde a repercusiones (originadas por la propia aerolínea -generadas desde el aeropuerto de origen o aeropuerto intermedio-); 12% corresponde a mantenimiento de aeronaves (falta del personal, espera de refacciones, cambio de avión por razones técnicas, entrega tarde del avión por servicio programado o no programado de mantenimiento, falta de partes en almacén, etc.); 8.34% corresponde a tripulaciones (asignación errónea de tripulación, esperando tripulación de reserva, tripulación presentándose tarde, procedimientos de salida tardíos); 2.5% corresponde a tráfico/documentación (abordaje lento, discrepancia en número de pasajeros, etc.), sobre venta, localización o espera de pasajeros en tránsito, errores al documentar, cierre tarde del vuelo, bajando equipaje voluminoso, bajando equipaje de pasajero que no abordó, falla en el manejo de pasajeros discapacitados, falla del sistema de documentación).

Así las cosas, resulta de un especial cinismo amenazar con aumentar las tarifas, si las mismas aerolíneas acusan estos vicios de operación -debido a su mal servicio-. En todo caso, si les afecta pagar penalizaciones por demora, deberían respetar los horarios pactados con los usuarios y ofrecer un servicio a la altura del cobro que realizan. Si las aerolíneas no tuvieran contratiempos derivados de su desorden en la operación, no les faltara personal, tuvieran refacciones disponibles, programaran bien y a tiempo los mantenimientos de las aeronaves, organizaran bien su tripulación, no sobrevendieran asientos, no tendrían por qué tener estos costos extra, que ahora, desvergonzadamente pretenden hacer pagar a los usuarios en el costo del boleto. Ahí es dónde vamos a ver si los senadores de la República se fajan los pantalones para meter orden en un rubro donde hoy por hoy, el usuario está absolutamente desprotegido frente a tanto abuso.

gabtorre@hotmail.com