La Estación Científica ‘Las Joyas’, enclavada en la majestuosa ‘Reserva de la Biosfera Sierra de Manantlán’, fue galardonada con el ‘Premio Jalisco 2024’ en el ámbito Científico, debido al impacto trascendental en la comprensión de los procesos ecológicos y la importante labor en favor de la biodiversidad. El reconocimiento otorgado no solo celebra la excelencia científica de la Estación “Las Joyas”, sino que también destaca su enfoque integral y comunitario, que ha resulta esencial para la conservación de la biodiversidad en la región.

Con una extensión de 1,245 hectáreas, la Estación se sitúa en una confluencia biogeográfica que alberga una riqueza única de especies, lo que la convierte en un punto estratégico para el monitoreo de fenómenos naturales y la investigación de procesos ecológicos. La Estación promueve un enfoque de conservación que va más allá del mero estudio académico, al involucrar a las comunidades locales en la protección y manejo de su entorno. Este modelo colaborativo ha propiciado la creación de “Juntas Intermunicipales”, una propuesta de gobierno que permite a los municipios de la Costa Sur y la Sierra de Amula gestionar de manera conjunta los recursos naturales, asegurando su conservación a largo plazo y generando beneficios tangibles para la población.

El laboratorio de ecología “Gonzalo Halffter Salas” y el aula “Hugh Iltis” son espacios clave dentro de la ‘Estación’, donde se llevan a cabo investigaciones que han resultado en más de 120 tesis y numerosos proyectos que contribuyen al conocimiento global sobre ecología y biodiversidad. Además, “Las Joyas” implementa avanzados métodos de monitoreo, como el uso de cámaras trampa para estudiar poblaciones de felinos, cuyo análisis es crucial para desarrollar estrategias de conservación efectivas frente a los desafíos del cambio climático y la deforestación.

La formación y capacitación técnica que ofrece la estación no se limita a la academia. A través de programas dirigidos a brigadistas y estudiantes, “Las Joyas” fomenta el desarrollo de habilidades prácticas en el manejo de recursos naturales y la lucha contra incendios, fortaleciendo así las capacidades del occidente de México para enfrentar emergencias ambientales. 
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