Fotografía: IMER
El 27 de febrero de 2020, la Secretaría de Salud publicó el comunicado 076. covid-19: ‘Acciones de preparación y respuesta en México’. Aquí se definieron las primeras “actividades de preparación, de los tres escenarios: 1) Importación Viral. En donde se espera detectar los primeros casos provenientes de los países con transmisión local sostenida; 2) Dispersión Comunitaria. Una vez importado el virus a México, se espera la presencia de brotes comunitarios, y; 3) Fase de epidemia. Con presencia del virus en todo el territorio y la presencia de brotes de covid-19 en varias regiones del país”
https://www.gob.mx/salud/prensa/076-covid-19-acciones-de-preparacion-y-respuesta-en-mexico .
Nos encontramos a días de que el número de contagios confirmados pase de centenas, a miles. Con ello sobrevengan brotes regionales y dispersión nacional de la enfermedad, lo que llevará a que el gobierno federal declare la Fase Tres o ‘Fase de Epidemia’. Como lo explicó el Dr. Hugo López-Gatell, “Hay una propagación del virus más extensa, por lo que se hace aún más difícil interrumpir la cadena de transmisión”… “Este es el momento de quedarnos en nuestra casa y disminuir la transmisión, porque la situación va a ser aún más intensa, incluso después del 30 de abril”. Cara a la multiplicación de los contagios, el presidente de la República logró ayer un importante acuerdo con la Asociación Nacional de Hospitales Privados, mediante convenio con el sector salud público, para destinar 3 mil 300 camas de hospitales privados a la atención de enfermos de covid-19 y 500 camas más de terapia intensiva dedicadas a pacientes con coronavirus.
Como bien lo consigna Milenio, ésta es la fase de “máxima transmisión, la de máximos casos por día; y el riesgo es que se sature el sistema de salud…” como ha pasado en algunos países de Europa y algunas ciudades de Estados Unidos. Durante esta fase, se deberán aplicar medidas más drásticas de restricción, cuarentena generalizada y un protocolo sanitario más estricto. En esta etapa el contagio puede alcanzar a miles de personas en amplias zonas geográficas del país, y se deberán aplicar medidas más drásticas. Se ha estimado (El Universal) que el covid-19 infectaría a entre 0.5 por ciento y 1 por ciento de la población total del país, lo que podría representar hasta 1.2 millones de personas.
Afortunadamente, el subsecretario López-Gatell reconoce que cada estado podrá decidir las medidas y actuar frente a la pandemia de coronavirus: “Se requiere por dos razones: todos los gobiernos son libres y soberanos, y además están identificados como autoridades sanitarias en la Ley General de Salud, por lo que tienen una responsabilidad específica”. “Lo que ocurra en cada estado de manera directa es responsabilidad de los gobernadores, por eso tiene que haber flexibilidad para adaptarse a cada una de sus realidades”. Como bien lo reconoce, es una ‘política válida’ extremar medidas de prevención como lo ha hecho Jalisco, “porque la epidemia no se comporta con la misma velocidad e intensidad en todas las entidades federativas”. Efectivamente, aquí es dónde debe mostrarse los beneficios del ‘federalismo’, con la iniciativa responsable de gobiernos locales, universidades y municipios.
https://www.milenio.com/opinion/gabriel-torres-espinoza/con-pies-de-plomo/que-significa-la-fase-tres
