Foto: salvadorcaro.mxMILENIO aseguró ayer, categóricamente, que Salvador Caro no aprobó los exámenes de control de confianza. Requisito para que siga al frente de la Seguridad Pública de Guadalajara. El propio Caro Cabrera habría señalado antes que, de no acreditar estos exámenes, dejaría el cargo. MILENIO JALISCO publicó ayer que “tuvo acceso al oficio SG/CC/1403/16 emitido por la Secretaría de Gobernación de quien depende el Centro Nacional de Certificación y Acreditación, en donde se revela que el resultado de los exámenes de control y de confianza que presentó fue de “No Aprobado”. Ya antes, este funcionario municipal había aprobado estos exámenes… pero con restricción. También, antes, se había desatado una polémica por las reacciones de las autoridades municipales a lo publicado por este medio de comunicación.

 

Ayer mismo, el secretario general del ayuntamiento dio rueda de prensa, con la notable ausencia del alcalde de Guadalajara. En ella, Ibarra Pedroza afirmó que “Personajes del Cisen, el Poder Judicial de Jalisco, el Gobierno del Estado y la Fiscalía General del Estado, orquestaron un pacto secreto para atacar al gobierno municipal de Guadalajara y desarticular el proyecto político de Enrique Alfaro y Movimiento Ciudadano, acusó Enrique Ibarra Pedroza, secretario general del Ayuntamiento tapatío”. No obstante, el secretario general no mostró documento que pruebe que la fuente que MILENIO citó miente; es decir, que habría reprobado los exámenes aplicados el 12 y 13 de octubre de 2016.

Como hay un antecedente importante en este mismo tema, con unos exámenes que no acreditó del todo (condicionados), lo que se esperaba ayer, es que se mostraran las pruebas irrefutables de que, en efecto, Salvador Caro sí aprobó los exámenes el 12 y 13 de octubre de 2016. A contra pelo, se acusa de un “complot” a un conjunto de instituciones, sin refutar de fondo lo publicado por este diario.

Recordemos que el mismo Salvador Caro inició una acusación pública, mediante una llamada grabada al presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado. En este caso, Caro Cabrera tenía razón porque el magistrado de marras (aún magistrado), no debió hacer la llamada, menos abordar los temas que denota el audio. Pues bien, ahora parece regresar Salvador Caro al centro de una polémica, debido a que persiste la duda sobre sí aprobó los exámenes de Control de Confianza. Acusar de un complot para descarrilar el Ayuntamiento de Guadalajara, no explica de fondo el centro del asunto. De tal forma que, por el bien de la ciudad, que pasa por serios aprietos en materia de seguridad pública, se debería de dejar absoluta y totalmente clara la verdad. Porque que en el documento de la Segob, que cita MILENIO, está reprobado. Mientras que en el documento de la PGR, aparece aprobado. Se hacen, entonces, ¿exámenes a la carta?